La empresa sanitaria ha desarrollado una serie de acciones para fortalecer el rol de las mujeres dentro de la compañía, lo que ha generado un cambio de cultura organizacional.
En el marco del Día del Trabajo, la Directora del Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género del Biobío (SernamEG), Lissette Wackerling y la Secretaria Regional Ministerial de la Mujer y la Equidad de Género, Marissa Barro realizaron una visita a la planta de agua potable “La Mochita” en Concepción, ocasión en que las autoridades destacaron el trabajo de la empresa sanitaria Essbio, en materia de buenas prácticas en equidad laboral e igualdad de género.
Durante la actividad, se dio a conocer la experiencia de trabajadoras de Essbio que se desempeñan en oficios no tradicionales y que en la actualidad corresponde a un 7% de la fuerza laboral nacional. Es el caso de Camila Islas, la primera mujer a cargo de la supervisión de calidad de producción en la historia de la planta. “Yo me siento muy cómoda, trabajo con hombres hace mucho tiempo, ya que antes me dedicaba al área de construcción. Ha sido una grata sorpresa, he encontrado gente muy comprometida con el trabajo. Creo que igual hay a algunos hombres que les cuesta un poquito cuando tienen jefatura mujer, pero en términos generales, yo creo que una se gana el respeto. La responsabilidad es muy grande, nosotros trabajamos con asegurar el agua potable, lo que conlleva directa relación con la salud de las personas. Es complejo, se trabaja 24/7, uno está siempre atenta, pero estoy súper orgullosa de lo que hago”, expresó Camila y agregó un mensaje a otras mujeres. “Somos capaces, esto no va en algo de género, yo me preparé mucho. Cuando empecé a estudiar, sabía que me iba a tocar pelear a la par con hombres, por lo tanto, me preocupé mucho de la carrera que estudié. Es importante entender que estamos en una cultura que es un poco machista y hay que prepararse, pero yo creo que todas las mujeres somos muy capaces de hacer lo que nos propongamos”.
Por su parte, la Directora Lissette Wackerling afirmó que “como SernamEG Biobío, inauguramos mayo destacando a trabajadoras en oficios no tradicionales en alianza con Essbio, considerando que el 22% de las labores de la empresa sanitaria son ejecutadas por mujeres, muy por encima del 1% que es el promedio regional. Hemos querido visibilizar a mujeres que además de trabajar en rubros donde hay mayor participación de hombres, lo hicieran en cargos de jefatura y supervisión, como es el caso de Essbio, rompiendo así estereotipos con respecto a las áreas donde pueden desempeñarse las mujeres”, agregó la autoridad regional.
En Chile, la participación laboral femenina alcanza el 48,5% en el país, mientras que, en la región del Biobío representa un 41%, motivo por el cual el Sernameg ha desarrollado una campaña para incrementar la incorporación de mujeres, en distintos rubros con mayor estabilidad laboral y mejores salarios, dejando atrás barreras de género.
Peter Schmohl, gerente regional de la empresa sanitaria, sostuvo que actualmente 271 mujeres son parte de Essbio, y que “el 24% de las posiciones de liderazgo en Essbio son ocupadas por fuerza laboral femenina, lo que significa un incremento de un 5% en comparación con 2014; mientras que los cargos de supervisión los lideran en un 20% mujeres, cifra que en 2014 correspondía a un 11%”.
Por su parte, Marissa Barro, Seremi de la Mujer y Equidad de Género de Biobío, explicó que “queremos demostrar primero que las mujeres tenemos capacidades de sobra, que lo que nos falta siempre son las oportunidades, y segundo, potenciar estas opciones, a través de, por ejemplo, el trabajo que estamos haciendo con SernamEG en la Mesa Público-Privada de Equidad de Género, en la que participan empresas regionales, entre ellas Essbio, además de la Academia y algunos servicios públicos y, en donde se generan instancias como ésta. Tenemos que trabajar como un verdadero ecosistema, para que las mujeres se atrevan a estudiar carreras, a veces más masculinizadas u oficios no tradicionales”, aseguró.
Buenas prácticas
Desde 2014 Essbio ha desarrollado un cambio de cultura organizacional e implementado una política de contratación y ascenso de mujeres en puestos de jefaturas y operarias en áreas “masculinizadas” como diseño, producción, mantención y reparación, incorporando además medidas de buenas prácticas laborales para conciliar la vida laboral y familiar.
Entre estas acciones destaca la creación de la Unidad de Equidad de Género, Diversidad y Calidad de Vida, que lidera acciones y medidas de conciliación trabajo y familia, entre ellas: post natal progresivo que permite a la trabajadora reintegrarse gradualmente a su puesto de trabajo durante los primeros tres meses de su regreso; capacitaciones sólo en horario laboral; salud para colaborador y su familia; programas de vacaciones; jornadas flexibles de trabajo e integración de la familia.