Psicóloga Clínica-Comunitaria por la Universidad de Santiago y Doctora en Estudios de Género y Globalización por la Universidad Estatal de Nueva York, es la actual seremi de la Mujer y la Equidad de Género, María Fernanda Glaser Danton. La secretaria regional posee una amplia trayectoria en investigación inserta en territorios vulnerables y segregados, tanto rurales como urbanos, de la región de Coquimbo. Antes de asumir como seremi se desempeñaba como cientista social de la sede regional del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) e impartía la cátedra de Teoría Feminista en el Magíster de Estudios de Género e Intervención Psicosocial de la Universidad Central, Sede La Serena.
La secretaria Ministerial Regional tiene 44 años y lleva casi una década siendo parte del Colectivos Feministas, plataforma de activismo político desde donde se ha articulado con organizaciones de base para impulsar la defensa y ejercicio de los derechos de las mujeres y disidencias sexuales en la conurbación Serena-Coquimbo.
Desde el feminismo comunitario, María Fernanda fue parte de acciones de educación popular que van desde seminarios sobre construcción de culturas no sexistas, hasta acciones de memoria histórica como conversatorios con sobrevivientes de violencia política sexual en la dictadura, pasando por derechos sexuales y reproductivos y campañas de solidaridad con mujeres en desastres naturales como el tsunami y terremoto del año 2015 y la creación de una red de abastecimiento feminista para mujeres y ollas comunes en la pandemia de 2020.
Bajo el mandato del Presidente de la República, Gabriel Boric, los desafíos para esta cartera son variados e intensos. A nivel declarativo, el presidente ha establecido que este es un Gobierno Feminista, lo que significa que las mujeres, diversidades y disidencias deben sentirse parte de toda política pública que emane del Ejecutivo, de acuerdo al principio de igualdad y no discriminación que debe cruzar todo el quehacer del Estado. Esta temática es parte del ADN del actual Gobierno y así lo ha reforzado la Ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Antonia Orellana. Para María Fernanda Glaser son desafíos de la más absoluta relevancia, toda vez que, por primera vez desde el retorno a la democracia, la seremi de la Mujer y la Equidad de es parte del Comité Político Regional donde se analiza la contingencia y se toman decisiones regionales.
Respecto a los diversos desafíos de la seremi que lidera, María Fernanda Glaser, apunta a la transversalización de la perspectiva de género en las políticas públicas del Estado, “por primera vez incorporaremos una perspectiva feminista en el Gobierno. Esto significa velar por la coordinación, consistencia y coherencia de las políticas, planes y programas en materia de equidad de género, y su incorporación en forma transversal en los distintos órganos del Estado. También abordaremos, junto a Sernameg, la recuperación de empleo, atención, prevención erradicación y sanción de la violencia contra las mujeres y comenzaremos un trabajo a largo plazo en lo que se refiere a la corresponsabilidad y cuidados, demandas largamente enarboladas por los movimientos feministas y de mujeres organizadas.”
Uno de los aspectos importantes y que se diferencia con el Gobierno anterior será el trabajo y reconocimiento a la identidad de género de las disidencias, “invisibilizar a la comunidad LGBTIQA+ es una expresión de discriminación. Y nuestro Gobierno está comprometido con erradicar la discriminación por motivos de identidad y orientación sexual de parte del Estado. De hecho, el programa del Presidente Gabriel Boric incluye la modificación de la ley de Identidad de Género para permitir el cambio de nombre y sexo registral a menores de 14 años y reconocer la identificación de identidades por fuera del binarismo de género en un carnet no binario, por nombrar sólo un par de medidas concretas. ”
Respecto al sello de gestión que quiere implementar la seremi, María Fernanda Glaser indica que es fundamental llegar a todas las mujeres, diversidades y disidencias, pero hay que poner énfasis en grupos que han estado rezagados, “yo vengo desde el trabajo comunitario y colectivos feministas donde trabajamos en los territorios y con las comunidades. Las brechas y barreras que sufren las mujeres pobladoras, mujeres rurales, migrantes e indígenas son diversas y se deben analizar desde el paradigma de la interseccionalidad”.