Chile presenta indicadores de género 2024: avances y desafíos hacia la igualdad de género

Estudio sostiene que por cada 100 hombres en situación de pobreza, 130 mujeres enfrentan esta condición en Chile, revelando la persistente feminización de la pobreza y la urgencia de acelerar los esfuerzos hacia la igualdad.

En el marco de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y de la Agenda Regional de Género de América Latina y el Caribe, ONU Mujeres, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y presentan el informe “La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y la Agenda Regional de Género en América Latina y el Caribe: Indicadores de género de Chile a 2024”.  Documento que tiene como propósito entregar un diagnóstico actualizado sobre la situación de las mujeres en el país y constituye una herramienta clave para el diseño de políticas públicas basadas en evidencia.

El estudio que además fue  elaborado con el apoyo del programa regional Las Mujeres Cuentan de ONU Mujeres, ofrece un análisis detallado de los avances y brechas en materia de igualdad de género a través de indicadores vinculados a nueve Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Dentro de los cuales se destacan los principales hallazgos:

  • Persistencia de la feminización de la pobreza: por cada 100 hombres en situación de pobreza, hay 130 mujeres. Además, el 17,6% de las mujeres no cuenta con ingresos propios, frente al 9,5% de los hombres.
  • Brechas en salud y nutrición: el 19,3% de las mujeres sufre inseguridad alimentaria entre 2021 y 2023, y el 19,4% de las mujeres embarazadas presentaron anemia.
  • Violencia de género: en 2023 se registraron 42 femicidios consumados y 259 femicidios frustrados. Dos de cada diez mujeres han sufrido violencia por parte de su pareja en los últimos 12 meses.
  • Desigualdad en el trabajo y los ingresos: las mujeres tienen una tasa de desocupación del 9,3% frente al 7,9% de los hombres, y una brecha salarial del 12%.
  • Participación política limitada: solo el 16,5% de las alcaldías, el 24% en el senado y un 35,5% en la cámara de diputadas y diputados.
  • Carga desproporcionada de cuidados: las mujeres dedican el 18,4% de su tiempo diario al trabajo doméstico y de cuidados no remunerado, frente al 10,5% de los hombres.

 

Respecto de este estudio, la Ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana, indicó: “Como Gobierno, valoramos la realización de este estudio porque muestra con claridad dónde persisten las brechas de género y hacia dónde debemos orientar las políticas públicas para el futuro. Estos datos nos recuerdan la urgencia de acelerar los esfuerzos, y en ese sentido, estamos decididas a avanzar con toda la fuerza en lo que resta de nuestro período, implementando iniciativas de largo plazo, como la Ley Integral contra la violencia hacia las mujeres, que gracias a un préstamo del Banco Mundial, garantiza su implementación más allá del gobierno de turno. Asimismo, estamos avanzando en el debate legislativo para contar con una nueva Ley de Sala Cuna, que incluya a hombres y mujeres en este derecho; y un Sistema Nacional de Cuidados, para lograr una distribución más equitativa de las responsabilidades de cuidado en la sociedad”

Conocer y analizar estos indicadores es fundamental para comprender cómo se entrecruza la igualdad de género con cada uno de los ODS. Solo con datos precisos y desagregados es posible visibilizar desigualdades históricas, monitorear los progresos y diseñar políticas públicas que respondan de manera efectiva a las necesidades de mujeres y niñas. En palabras de Gabriela Rosero, Jefa de Oficina de ONU Mujeres en Chile: “Los datos son una herramienta de transformación. Contar con indicadores de género actualizados nos permite visibilizar las desigualdades que enfrentan las mujeres y niñas en Chile, y al mismo tiempo orientar políticas públicas más efectivas. Este informe muestra que, aunque se han alcanzado avances, persisten brechas estructurales que debemos abordar con urgencia para acelerar el cumplimiento de la Agenda 2030 y garantizar una igualdad sustantiva”.

Estos hallazgos muestran que, pese a los avances alcanzados, persisten desafíos estructurales que requieren de acciones sostenidas y coordinadas a nivel regional y nacional. En este contexto, resulta clave fortalecer los compromisos ya asumidos y avanzar hacia la construcción de una sociedad más justa e igualitaria. Como subrayó Ana Güezmes, Directora de la División de Asuntos de Género de la CEPAL: Los países de América Latina y el Caribe han dado pasos importantes hacia la igualdad de género, pero aún falta mucho camino. Con el Compromiso de Tlatelolco, la región se propone una década de acción para alcanzar la igualdad sustantiva de género y construir una sociedad del cuidado. Entre los acuerdos destacan fortalecer la transversalización de género en los sistemas estadísticos nacionales, la incorporación del enfoque de género e interseccionalidad en toda la producción estadística, avanzar en mediciones del bienestar más allá del PIB y visibilizar el trabajo no remunerado”.

Un llamado a la acción
El informe concluye que, si bien Chile ha registrado avances en marcos normativos, institucionales y políticas públicas con enfoque de género, persisten barreras estructurales que limitan la autonomía de las mujeres y las niñas. Se requiere acelerar los esfuerzos para construir una sociedad del cuidado, con políticas interseccionales, recursos adecuados y alianzas sólidas entre el Estado, la sociedad civil y los organismos internacionales.

En este contexto, contar con información estadística confiable, desagregada y con enfoque de género es un requisito indispensable para la formulación de políticas públicas efectivas. Así lo destacó Ricardo Vicuña, Director General del Instituto Nacional de Estadísticas de Chile: “Nuestra institución mantiene un compromiso sostenido con la incorporación del enfoque de género en la producción estadística nacional; y ese compromiso no solo se refleja en lo técnico y metodológico, sino también en la coordinación interinstitucional que hemos desarrollado. Acciones que tienen como objetivo construir una base de evidencia estadística sólida y cada vez más inclusiva, que permita a las instituciones diseñar, implementar y evaluar políticas públicas que promuevan la igualdad de género en Chile”.

Los datos no solo permiten identificar las brechas de género, sino también orientar las políticas hacia soluciones sostenibles y equitativas. En este sentido, el informe se constituye como una herramienta estratégica para guiar la transformación estructural que requiere Chile y para avanzar con decisión hacia una igualdad sustantiva.

Si quieres ver la presentación completa del documento y sus principales hallazgos, lo puedes hacer en el siguiente enlace: youtube.com/watch?v=Z9YbGW6VDBI&feature=youtu.be.